El aceite de oliva virgen extra es el más apreciado en gastronomía. La clave para obtener un aceite de calidad es someter al producto a procesos mecánicos y físicos exclusivamente, sin que intervengan procesos físicos.
El primer paso para obtener este aceite es pesar y distinguir las aceitunas, que posteriormente pasan a ser molidas en un molino de martillos. Como resultado se obtiene una mezcla que se deposita en una batidora en un proceso totalmente hermético.
Esto todavía no se puede llamar aceite de oliva virgen extra, pues el aceite no se ha separado de la masa. Entran en juego entonces los procesos de centrifugado que dan como resultado, ahora ya sí, el aceite de oliva virgen extra, uno de los productos más sabrosos y nutritivos de la dieta mediterránea.
Las propiedades del aceite de oliva virgen extra que lo convierten en un producto básico
El AOVE (aceite de oliva virgen extra) controla los niveles de colesterol gracias a su alto contenido en ácido oleico. Elimina el colesterol malo y las grasas insaturadas y aumenta las grasas monoinstaturadas, grasas saludables, lo que favorece la circulación y la presión arterial.
Este producto es también beneficioso para el funcionamiento del aparato digestivo, pues reduce los ácidos gástricos y mejora la absorción de nutrientes. El AOVE se utiliza como remedio casero desde hace siglos, pues el aceite se pega a las paredes y actúa como agente protector en el proceso digestivo.
Como tercer aspecto interesante cabe destacar su contribución al fortalecimiento del sistema óseo. La vitamina D y el calcio se absorben mejor si se lleva a cabo una dieta rica en aceite de oliva virgen.
La vitamina D no es la única favorecida con la ingesta de este producto, ya que el aceite de oliva virgen es rico es vitamina E, que está encargada de la regeneración de tejidos, ayuda a combatir infecciones y actúan como agente antioxidante.
Una propiedad interesante del aceite de oliva es que protege la memoria y la capacidad de aprendizaje, reduciendo el riesgo de accidentes cerebrales y el deterioro cognitivo.
Finalmente, este producto es apropiado también para prevenir enfermedades de relevancia como la diabetes tipo II. Los médicos y nutricionistas aconsejan acudir a la dieta mediterránea para reducir las opciones de sufrir esta enfermedad.
En komelosano usamos AOVE en la elaboración de nuestros platos, para consultar la carta pincha AQUÍ